Saber contabilidad básica permite que emprendedores y profesionales cuenten con una herramienta esencial para tomar decisiones.
Imagina un mundo donde las finanzas son un misterio insondable, donde las empresas operan en la penumbra sin entender realmente su posición financiera.
La contabilidad básica es como el lenguaje financiero universal que permite a las empresas conocer y comunicar su salud económica de manera clara y precisa.
Conocer los principios fundamentales de la contabilidad no solo es relevante para los contadores profesionales, sino que se convierte en una habilidad esencial para cualquier persona que tenga aspiraciones empresariales o incluso para aquellos que buscan manejar su economía personal de manera eficiente.
El problema de no saber contabilidad básica
La falta de información y conocimiento contable/financiero puede llevar a las personas a no tomar las mejores alternativas que presenta el mercado. Ya sea por falta de información, por poco conocimiento o, simplemente, por dejarse llevar por la oferta publicitaria del momento.
Esto afectará su quehacer personal con un impacto mensual de sus recursos. Perderá poder adquisitivo y será víctima de tasas excesivas o préstamos informales.
Saber y conocer de contabilidad básica es relevante para quienes dirigen, invierten o administran sus propios negocios. Les permite saber cómo se construye financieramente su negocio y comprender los informes financieros que son disponibilizados por los expertos de la materia.
Este entendimiento les permitirá conocer el lenguaje apropiado, las cifras de sus recursos y los resultados económicos obtenidos por la empresa. Podrán interactuar con entes reguladores o instituciones financieras a la que pueden acceder para financiamiento de capital de trabajo o futuras inversiones.
–¿En qué medida la contabilidad financiera puede ser útil en la detección temprana de problemas financieros y en la prevención de crisis económicas personales?
La contabilidad financiera proporciona información concreta y precisa de nuestro quehacer diario. En nuestras finanzas personales lo vemos reflejado en los ingresos y egresos de dinero, en los recursos que logramos adquirir en el tiempo para cubrir las deudas en el corto y mediano plazo. Esto nos permite tomar medidas tan cotidianas como el pago de servicios básicos, o reservar montos disponibles del grupo familiar para la recreación.
Todo ello nos permite tener una mejor planificación financiera para aquellos meses de mayor utilización de recursos. También disponer de excedentes monetarios para destinar a pasatiempos (vacaciones) o la adquisición de bienes para fines familiares, como la renovación del automóvil.
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