El entorno laboral actual exige profesionales capaces de navegar la incertidumbre y el cambio, mientras preservan el bienestar propio y de sus equipos. En este contexto, Michelle Bettancourt, tutora y coautora del curso «Inteligencia emocional para el liderazgo y el trabajo en equipo», nos explica cómo esta formación contribuye a transformar el liderazgo desde una dimensión más humana y empática.
Bienestar de los colaboradores
Lo primero que destaca Michelle es el hecho de que el éxito de una organización va de la mano con el bienestar de sus colaboradores. Esta idea fundamenta el propósito del curso: capacitar profesionales en inteligencia emocional, a través de cuatro módulos que combinan autoconocimiento, automotivación, autocontrol, comunicación efectiva y empatía, para así fortalecer su estilo de liderazgo y trabajo en equipo. «A través de cuatro módulos de contenido, los estudiantes comenzarán con su propio autoconocimiento y luego tendrán las herramientas para lograr una comunicación efectiva, potenciando así su bienestar tanto laboral como personal», complementa la tutora.
Autoconocimiento: el puntapié inicial
Uno de los pilares para el desarrollo de la inteligencia emocional es el autoconocimiento. Reconocer las propias fortalezas y debilidades permite gestionar las emociones y alcanzar un equilibrio entre lo laboral y lo personal, contribuyendo a una vida más plena y coherente en su rol como líder. Michelle expresa que «ese autoconocimiento permite reconocerse, y desde esa realidad, con sus luces y sombras, es posible desarrollar las mejoras para poder ser más feliz. Por cierto, esta característica es indispensable para alguien que, además, tiene a su cargo a más personas. Debe procurar, además, mantener un sano equilibrio entre los aspectos laborales y la vida personal de cada empleado».
Un curso con teoría puesta en práctica
El curso contempla componentes teórico-prácticos que permitirán hacer consciente la realidad emocional de cada participante. Luego de ese trabajo emocional a nivel personal, se podrá aprender herramientas que ayudarán a lograr una comunicación asertiva y empática, potenciando así el desarrollo tanto laboral como personal.
«Solo después de lograr una mejora personal a través de esos tres pilares (autoconocimiento, autocontrol y automotivación), el curso avanza hacia el desarrollo de habilidades sociales: la empatía y las relaciones interpersonales», sintetiza Michelle Bettancourt.
A través de cuatro módulos de contenido, el estudiante va aprendiendo a conocerse de forma progresiva. Se comienza con un test de autoconocimiento, que sirve de diagnóstico personal. «A medida que avanza el curso, se brindan tanto los conocimientos teóricos como prácticos para mejorar la gestión de las propias emociones, a través de diversos hábitos saludables que los participantes pueden comenzar a implementar inmediatamente», complementa la profesional.
La modalidad del curso es otro de sus puntos fuertes: 100 % online con acceso a la plataforma las 24 horas del día dentro del plazo de duración, lo que otorga autonomía al estudiante para avanzar a su propio ritmo sin sesiones sincrónicas obligatorias.
Casos de éxitos
Michelle comenta que hay varios ejemplos en donde empresas han implementado programas de bienestar emocional con resultados exitosos. Entre algunos de los casos más destacados está el de Google con su programa gPause, un software donde el personal reporta sus niveles de estrés y bienestar. En su primer año de implementación, Google reportó una disminución del 25 % en la rotación de personal. Otro caso es el de la empresa DHL, que luego de detectar una alta rotación en atención al cliente, decidió implementar programas de entrenamiento en inteligencia emocional. Al cabo de un año, esa rotación cayó en un 30 %, y sus índices de satisfacción del cliente reportaron significativas mejoras.
Finalmente, Michelle invita a todas las personas a participar de este curso porque «aplica tanto para quienes lideran equipos como para personas que se desempeñan de manera autónoma. Al aprender a gestionar las propias emociones no solo se optimiza la automotivación, sino que también mejoran las relaciones interpersonales; es decir, el hecho de conocerse a sí mismo y además contar con herramientas para administrar las propias emociones permite una mejora tanto a nivel personal como social».
Si estás interesado en profundizar más sobre esta materia, te invitamos a conocer el curso online que tiene Teleduc UC para ti sobre «Inteligencia emocional para el liderazgo y el trabajo en equipo», ingresando acá.